Argentina mejoró su calificación crediticia según S&P
La calificadora de riesgos Standard and Poor´s mejoró la calificación crediticia soberana de largo plazo de Argentina de B- a B, con perspectiva estable de largo plazo, al tiempo que afirmó las calificaciones soberanas de corto plazo en B.
Esta mejora obedece a los avances que Argentina está logrando en la resolución de sus desequilibrios macroeconómicos y a la reconstrucción de la credibilidad, en el marco de la previsibilidad de sus políticas y el fortalecimiento de las instituciones. En ese sentido, S&P destaca la relevancia de la reconstrucción del INDEC y la publicación de estadísticas confiables.
El ministro de Finanzas, Luis Caputo, sostuvo que “esta mejora es reflejo del trabajo que venimos haciendo con las calificadoras y los entes reguladores del crédito en todo el mundo para mostrarles la velocidad y la profundidad de los cambios que se están llevando a cabo en Argentina”. Y agregó: “Esta nota responde a la gestión que está haciendo el gobierno normalizando la economía y recuperando la credibilidad y la confianza del resto del mundo”.
Además, S&P subió su evaluación de riesgo de transferencia y convertibilidad (T&C) a B+ desde B-, ya que existe un “sostenido acceso local a divisas”, según afirma el informe oficial. Asimismo, indicó que prevé que la inflación continúe la tendencia descendente gradual y que la economía se recupere y crezca 3% en los siguientes tres años.
Entre otros indicadores, la agencia subraya que el Gobierno Nacional ha avanzado en la mejora de la liquidez externa y el acceso a la financiación comercial, tanto para el gobierno como para las provincias y compañías de Argentina.
Por otra parte, la tendencia estable incorpora la expectativa por parte de la calificadora de que las políticas presentarán una amplia continuidad en los siguientes dos años. En ese marco, S&P destaca que el crecimiento del acceso al crédito jugará un papel importante como motor para la recuperación de la economía en 2017, al tiempo que resalta la importancia de la rápida resolución de los litigios con los acreedores holdout.