Basado en los principios de cooperación, reciprocidad e interés mutuo, el memorando servirá para promover la integridad, eficiencia y solidez financiera de las entidades supervisadas, mejorando la regulación efectiva y creando un entorno propicio para la prevención de prácticas fraudulentas y otras prácticas prohibidas.

En relación al acuerdo logrado, el Dr. Silva dijo que “celebramos la firma de este compromiso de colaboración mutua con la CNAD, ya que El Salvador ha mostrado liderazgo, no solo en el uso de bitcoin, sino también en el mundo de los activos digitales y los proveedores de servicios de los mismos” y agregó que “desde la CNV, queremos trabajar con ellos por su valiosa experiencia”.

Las autoridades de ambos organismos comparten el objetivo de promover la protección de los inversores y apoyar el desarrollo continuo y la innovación en la regulación y supervisión de sus entidades supervisadas.

En esa línea, se prevé el intercambio de experiencias, el desarrollo de capacidades y la invitación a eventos o talleres de divulgación.

En su nuevo rol como regulador de los PSAV, la CNV trabajó arduamente este año en la creación del registro, en encuentros con representantes del sector y en el avance de la reglamentación que salió a consulta pública.

El primer acercamiento de la CNV al caso salvadoreño como país pionero en el mundo en incorporar el bitcoin y en el desarrollo de activos digitales en la región, se produjo con la visita de Reyes, en mayo pasado, cuando fue recibido por el Dr. Silva y la vicepresidente del organismo, Patricia Boedo.

A diferencia de la CNV de Argentina, que solo regula los proveedores de servicios de activos virtuales y, eventualmente a aquellos Activos Virtuales que constituyan valores negociables, la CNAD regula todo activo digital e instrumentos financieros digitales, pero también la Superintendencia Financiera y el Banco Central de Reserva de El Salvador son reguladores del BTC por tratarse de su moneda oficial.