La Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN) conmemora el 38° aniversario de la emisión de la Licencia de Operación para el primer ciclo de vida de la Central Nuclear Embalse (CNE), otorgada el 20 de enero de 1984. Se trata de uno de los hitos regulatorios más importantes del desarrollo de la actividad nuclear en la República Argentina, dado que la licencia autorizó el inicio de la producción comercial de la segunda planta nuclear construida en el país.

La construcción de la CNE comenzó el 7 de mayo de 1974 y, cinco años después, en 1979, se realizó el montaje de los tubos de presión en el reactor. La primera criticidad del reactor ocurrió el 13 de marzo de 1983 y, una vez cumplido este hito, la entonces rama regulatoria de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), antecesora de la ARN, emitió la primera licencia de operación de la central nuclear.

El primer ciclo de vida útil de la CNE abarcó desde aquel entonces, hasta el 31 de diciembre de 2015. Anteriormente, en 2007, había comenzado a desarrollarse el Proyecto de Extensión de Vida (PEV) de la central, proceso en el que la ARN desempeñó un rol fundamental, cumpliendo tareas de fiscalización y control regulatorio.

Las tareas realizadas por la ARN en el marco del PEV incluyeron la evaluación de la ingeniería de las modificaciones y los reemplazos con impacto regulatorio (en la seguridad nuclear y radiológica, las salvaguardias y la protección física), así como también la inspección de su implementación, con especial énfasis en las tareas relacionadas con los aspectos de seguridad.

El PEV de la CNE concluyó el 22 de agosto de 2019 con la emisión de la Licencia de Operación para su segundo ciclo de vida, una vez que la central completó satisfactoriamente las pruebas de puesta en marcha hasta el 100% de plena potencia y resultara adecuada a las evaluaciones de seguridad, realizadas por ARN.

En la actualidad, la CNE está operando en el marco de su segundo ciclo de vida, lo que representa un hito regulatorio en la República Argentina y a nivel mundial, ya que es la tercera central nuclear de tecnología CANDU en realizar el proceso de reacondicionamiento.

En el marco de esta nueva licencia, otorgada por la ARN, la central podrá operar por un período de hasta 30 años. El PEV de la CNE se caracteriza, además, por ser el único proyecto que, hasta el momento, incluyó el reemplazo de los generadores de vapor.