La norma fue promulgada parcialmente el 26 de octubre de 1992 y entró en vigencia a partir del 1° de enero de 1993.

Cabe mencionar que la Ley de Administración Financiera se sancionó en el marco del proceso de reforma del Estado iniciado con la Ley 23.696, por la que se declaró en estado de emergencia la prestación de los servicios públicos, la ejecución de los contratos a cargo del sector público y la situación económico-financiera de la Administración Pública Nacional centralizada y descentralizada, empresas y sociedades del Estado con participación estatal mayoritaria y los servicios de cuentas especiales, entre otras.

Las funciones de contralor que reposaban sobre el Tribunal de Cuentas de la Nación y la Sindicatura General de Empresas Públicas, fueron sustituidas por los nuevos órganos de control interno y externo, es decir, la Sindicatura General de la Nación y la Auditoría General de la Nación respectivamente.