Edición 14 - julio 2021
El consumo de productos orgánicos crece en el mundo a propósito de la creciente preocupación de los consumidores por acceder a productos saludables. Argentina está entre los primeros productores orgánicos del mundo, puesto que alcanza con alimentos y productos de un alto valor agregado, nutritivos, saludables y certificados que provienen de campos de las 23 provincias argentinas.
De acuerdo con lo manifestado por Rubén Geneyro, presidente del INTI, “la producción orgánica viene creciendo a tasas interanuales superiores al 10% y ya cuenta con más de 3,6 millones de hectáreas certificadas, lo que coloca a nuestro país como el segundo en superficie bajo régimen de certificación orgánica a nivel mundial detrás de Australia. A su vez, la demanda global por productos orgánicos continúa creciendo de manera sostenida -especialmente en EEUU y Europa- y las ventas totales superan actualmente los USD 100.000 millones.
El INTI viene desarrollando diferentes actividades de apoyo a la producción orgánica regional con el objetivo de un agregado de valor cada vez mayor en las distintas regiones del país, la incorporación de tecnología y buenas prácticas, el escalado de productos a nivel industrial, la generación de producciones piloto para uso como muestras y partidas de exportación y la implementación de sistemas de calidad y diferenciación acordes a la demanda de los mercados objetivo como así también, la provisión de asistencia tecnológica para la mejora de procesos y productos destacando los atributos orgánicos e identidad regional.
Actualmente, se está acompañando a pequeños productores de jugos y néctares, harinas libres de gluten, frutas finas, embotellado, cierre y etiquetado de vino orgánico -así como en vinos orgánicos de altura-, dulces, arroz, especias, quinoa, bebidas a base de té y yerba mate, aceites esenciales de aromáticas, dulces orgánicos y alimentos balanceados para la industria acuífera. Estas iniciativas se están desarrollando en 12 provincias argentinas, abarcando una multiplicidad de temas productivos que puede atender el INTI sumado al conocimiento de las particularidades de cada territorio y realidad productiva local.