Leonardo Favio fue uno de los más grandes cineastas del país y sus películas están consideradas entre las mejores de la historia del cine argentino. Su trabajo actoral y su paso por la música también le dieron gran trascendencia popular, tanto en Argentina como en el resto de Latinoamérica. Durante toda su carrera supo conciliar el talento artístico con el compromiso político y social: ejemplo de ello en su documental Perón, sinfonía de un sentimiento (1999). Fallecido en 2012, dejó una inmensa obra que hoy forma parte del patrimonio cultural del país (cinco de sus películas fueron declaradas en 2022 como "Bien de Interés Artístico Nacional").

En ese sentido, como referente ineludible de la cultura argentina, la Universidad Nacional Arturo Jauretche (UNAJ) de Florencia Varela bautizó su audiotorio donde está emplazada la Casa del Bicentenario de esa localidad con el nombre de Leonardo Favio. El acto, realizado el pasado 23 de mayo, fue organizado por la Coordinación de Cultura de la UNAJ, en articulación con el Programa Casas de la Historia y la Cultura del Bicentenario, dependiente de la Dirección Nacional de Innovación Cultural de la Secretaría de Desarrollo Cultural del Ministerio de Cultura.

Por parte del Ministerio de Cultura estuvo presente Ariel Direse, director nacional de Innovación Cultural, acompañado por el equipo del Programa Casas del Bicentenario, coordinado por Cielo Pandolfi. También participaron el rector de la UNAJ, Arnaldo Medina, y la coordinadora de Cultura y responsable de la Casa del Bicentenario emplazada en la universidad, María Perossa. Junto al hijo de Leonardo Favio, Nicolás Favio, estuvieron presentes como invitados de honor el actor y director de teatro Ruben Stella; el compositor Antonio Tarrago Ros, y el cantautor Julio Lacarra.

El homenaje comenzó con una breve reseña sobre la vida de Favio, a cargo de María Ester Sánchez, la reconocida locutora que acompañó por años a Juan Alberto Badía en la radio. Luego se llevó adelante el descubrimiento de una placa con el encabezado “Casa de la Historia y la Cultura del Bicentenario" y el nombre del auditorio: “Leonardo Favio”.

En el acto, el rector de la UNAJ destacó: “Recibimos en este acto a la Dirección Nacional de Innovación Cultural del Ministerio de Cultura, y tal como su nombre indica, no me imagino una cultura que no sea innovadora. Favio es un ejemplo de innovación gracias a su espíritu libre y creatividad, puestos al servicio de buscar una estética que tenga que ver con la dinámica del pueblo”.

Por su parte, Ariel Direse mencionó: "Nos emociona muchísimo el descubrimiento de esta placa que bautiza al auditorio, la única Casa del Bicentenario emplazada en una Universidad Nacional, con el nombre de Leonardo Favio. Celebramos esta iniciativa, en este día tan especial, y nos enorgullece poder acompañar este espacio a través del proyecto de revalorización y consolidación regional de las Casas del Bicentenario".

El evento continuó con la presentación de una pieza audiovisual que resumió la trascendente trayectoria cinematográfica de Favio y cerró con un espectáculo de tango, a cargo de Bruno Berttacchini y Maite Alegre. Ambos interpretaron Canaro en París, de Juan D’Arienzo.