La World Conference on Creative Economy tuvo lugar del 7 al 9 de diciembre en Dubai Exhibition Center EXPO 2020. Se trata de un encuentro dirigido a decisores políticos, funcionarios y actores de las industrias culturales que tiene como objetivos principales el intercambio de ideas, la resolución de desafíos y la identificación de oportunidades en el campo de la economía creativa. Esta conferencia facilita los intercambios y los esfuerzos destinados a dar forma a las políticas futuras sobre la economía creativa global para garantizar el desarrollo sostenible de nuestro ecosistema cultural. La primera reunión fue realizada en Indonesia en el año 2018.

Este año, la conferencia tuvo una duración de tres días y reunió a distintos actores y representantes de todo el espectro de la economía creativa para discutir sus tendencias, desafíos y oportunidades. La WCCE 2021 marcó el cierre del Año Internacional de la Economía Creativa para el Desarrollo Sostenible 2021 de las Naciones Unidas.

De la edición 2021 de la WCCE, como autoridad del Ministerio de Cultura- y en representación del ministro de Cultura, Tristán Bauer- participó Lucrecia Cardoso, secretaría de Desarrollo Cultural. La secretaria expuso en la Reunión Ministerial que se desarrolló el 9 de diciembre, de manera presencial, en Dubai Exhibition Center EXPO 2020. En la misma, distintos ministros y representantes debieron realizar una breve intervención con el objetivo de compartir oportunidades y desafíos de sus naciones en el desarrollo de las industrias creativas.

Cardoso inició su disertación comentando acerca del impacto del Covid-19 en el sector cultural. Retomó un informe reciente de la UNESCO que establece que a nivel mundial, durante el año 2020 se perdieron 750.000 millones de dólares respecto de 2019, y más de 10 millones de puestos de trabajo se vieron afectados en el sector de las industrias culturales. Dado el contexto, el Ministerio de Cultura tuvo que reorientar sus prioridades y su presupuesto para poder hacerle frente a la inversión en emergencia. La secretaria planteó que nos encontramos en una nueva etapa, la de la reconstrucción, comenzando a transitar las aperturas de distintas actividades culturales lo que incentiva la tarea de fortalecerlas y desarrollarlas con la mirada puesta en un mejor porvenir.

Otros datos que compartió Cardoso estuvieron asociados específicamente a las industrias culturales, señalando que constituyen uno de los sectores más dinámicos de la economía nacional y global: aportan el 3% del PIB mundial y, según estimaciones de la Cuenta Satélite de Cultura de Argentina, las industrias culturales representaron en el año 2019 el 2,6% del valor agregado bruto total del país. Cabe destacar que, para comprender la magnitud del aporte de la cultura en nuestro país, es posible hacer una comparación con otros sectores como: el sector de Pesca, que aporta un 0,4%; los sectores de Producción de energía, con un aporte de un 2,25% y/o el de Hoteles y restaurantes, aportando un 2,3%. En relación a esto, también resaltó que las industrias culturales con adecuadas políticas de fomento cumplen un papel fundamental en la recuperación de la economía en general, ya que inciden directamente en el desarrollo sostenible de nuestros países (tanto en lo económico como en lo social), implicando la creación de nuevos puestos de trabajo formal, de calidad, con un alto potencial exportador, profundizando la inclusión social y generando valor agregado en sectores estratégicos que hoy tienen nuevos mercados y nuevas demandas y un enorme potencial de crecimiento.

En línea con lo anterior, la secretaria indicó que el Ministerio de Cultura trabajó intensamente en organizar el Mercado de Industrias Culturales Argentinas (MICA), un claro ejemplo de cómo un evento se transformó en una política pública desde hace 10 años. Frente a los presentes, comentó que el MICA surgió con objetivos claros como el de potenciar la producción, aportar a la visibilidad y promover la comercialización en todos los sectores, teniendo en la actualidad 16 sectores identificados, agrupados y segmentados según su especificidad, sus expresiones y sus modelos de negocios. Señaló, además, que la edición 2021 del MICA tiene una fuerte impronta en ampliar las capacidades de internacionalización y exportación de las industrias culturales, con el fin de profesionalizar cada cadena de valor para potenciar a los sectores y para aumentar la presencia de los bienes y servicios culturales argentinos en el mundo.

Cardoso finalizó su exposición expresando que el universo digital como espacio de circulación del ingreso cultural es uno de los mayores desafíos de la actualidad, que continúa creciendo a pasos agigantados, evidenciando ejes centrales que estaban en agenda y que hablan del impacto de la era digital en la cadena de valor de los distintos sectores. En este nuevo contexto, remarcó la importancia fundamental de trabajar sobre el diseño de medidas que hagan frente a la creciente tendencia a la concentración digital, la reconversión laboral y tecnológica para el universo digital, y la reducción de la brecha digital para continuar democratizando el acceso a la cultura. Y por último, celebró espacios de diálogo como el que propicia la World Conference on Creative Economy (WCCE), dada la relevancia que tiene para generar ámbitos de cooperación internacional que permiten fomentar la asociatividad, las coproducciones, y el intercambio comercial a nivel internacional entre los actores principales de las industrias culturales y creativas y así, promover el trabajo conjunto entre el sector público-privado y también, la transversalidad.