Nueva Guía de Buenas Prácticas Comerciales en Cuestiones de Géneros y Diversidades
La Secretaría de Comercio Interior presentó una guía de buenas prácticas que brinda herramientas para que las empresas adopten la perspectiva de género en sus procedimientos comerciales.
La Secretaría de Comercio Interior del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación presentó una guía de buenas prácticas que brinda herramientas para que las empresas adopten la perspectiva de género en sus procedimientos comerciales. Frente a la necesidad de abordar la doble desigualdad que enfrentan las mujeres y diversidades en las relaciones de consumo, primero como consumidoras/es y, además, por su condición de género u orientación sexual, el documento tiene por objetivo lograr relaciones de consumo más equitativas.
"Con la creación de esta guía, nos proponemos darles a las empresas los instrumentos que necesitan para que adopten la perspectiva de género a sus prácticas comerciales y que, gracias a esto, se genere una verdadera transformación en las relaciones de consumo", expresó la secretaria de Comercio Interior, Paula Español.
La conferencia virtual contó con la presencia del director nacional de Defensa de las y los Consumidores, Sebastián Barocelli, la coordinadora del Gabinete de Género del Ministerio de Desarrollo Productivo, Paula Basaldúa, y la secretaria de Políticas de Igualdad del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad, Pilar Escalante.
“La perspectiva de género está presente en todo el trabajo que realizamos desde el inicio de la gestión. Es nuestra voluntad incorporar y proponer estos desafíos junto a varias iniciativas como esta guía de buenas prácticas que se presenta como un documento disparador para el cambio cultural”, destacó Barocelli, y agregó que “la presentación es una construcción colectiva que se forjará a través de los conocimientos y aportes comunitarios, por eso la convocatoria es amplia y plural”.
Esta guía, que continúa en desarrollo, es llevada adelante gracias al trabajo en conjunto de la Secretaría de Comercio Interior, el Gabinete de Género del Ministerio de Desarrollo Productivo y el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación. Surge a partir de la necesidad de abordar la doble desigualdad que enfrentan las mujeres y diversidades en las relaciones de consumo, primero como consumidoras y además por su condición de género u orientación sexual. De esta manera, desde el Gobierno Nacional se comprende que la atención que debe dársele desde el Estado es mucho mayor y contar con una Guía de Buenas Prácticas en las Relaciones de Consumo con Perspectiva de Géneros, permite seguir cimentando una sociedad más igualitaria y democrática.
Basaldúa, por su parte, manifestó que “es una alegría poder estar presentando este trabajo que venimos llevando adelante con la Secretaría de Comercio Interior y forma parte de las iniciativas que lleva adelante el Ministerio de Desarrollo Productivo en el marco del Plan Nacional de Igualdad en la Diversidad. Desde el año pasado llevamos adelante una política integrada y transversal en materia de género, que implica poder cerrar las brechas de desigualdad que afectan a las mujeres y diversidades”.
A su turno, Escalante remarcó que “desde el Estado esté la clara definición de escuchar las demandas y producir y construir herramientas, que reconociendo la realidad, se proponen como elementos de cambio y de reducción de las inequidades para avanzar a una sociedad más igualitaria, y tiene que ver con la voluntad del gobierno de avanzar con políticas transversales en este sentido”.
Durante el encuentro virtual se presentó el documento de trabajo que se funda sobre los distintos aspectos de las relaciones de consumo proveyendo recomendaciones para lograr prácticas equitativas, respetuosas del trato digno y no discriminatorio. También, aborda cuestiones como la información, los rotulados, la publicidad, los formularios y contratos, y demás prácticas relativas a la salud, a la seguridad y a las condiciones de atención y trato.
Desde la Secretaría de Comercio Interior ya se viene trabajando en este sentido, a partir de diversas y reiteradas imputaciones a empresas por incumplir el trato digno o restringir el acceso al consumo por cuestiones de género u orientación sexual. Además, se formó un equipo de abogados y abogadas que se encarga especialmente de tomar aquellos reclamos de consumidoras y consumidores hipervulnerables y brindarle un tratamiento prioritario, que contemple dicha fragilidad y se generaron y difundieron numerosas herramientas de comunicación para que las y los consumidores conozcan sus derechos y los hagan valer.