La política pública para erradicar la trata de personas y el trabajo forzoso se sustenta en la articulación institucional. Desde sus competencias, los principales aportes del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social son la prevención, detección de indicios de explotación laboral y la asistencia a las víctimas a fin de insertarlas en el mundo laboral a través de sus programas y herramientas.

El Ministerio trabaja conjuntamente con el Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (RENATRE) con miras a realizar operativos de fiscalización laboral conjunta en zonas rurales; y también articula esfuerzos con otros organismos con capacidades fiscalizadoras a nivel nacional, como son la Dirección Nacional de Migraciones, la Administración Federal de Ingresos Públicos y las administraciones laborales provinciales.

En cuanto a la asistencia a las víctimas se realiza un trabajo articulado con el Ministerio de Desarrollo Social y con los Puntos Focales Provinciales, a fines de lograr la restitución efectiva de los derechos vulnerados a las mismas.

En el marco del MERCOSUR, se articula con los otros países miembros para reforzar la prevención, la detección y la asistencia a las víctimas transnacionales. Como fruto de este trabajo se aprobó el Plan Regional para la prevención y erradicación del trabajo forzoso y la trata de personas con fines de explotación laboral.

Plan Regional para la prevención y erradicación del trabajo forzoso y la trata de personas con fines de explotación laboral

Este Plan, propuesto por Argentina, fue aprobado en el año 2019. A través de él, busca llevarse a cabo la Declaración de ministros de Trabajo de MERCOSUR de fecha 26 de junio de 2015 que consideró conveniente la elaboración de un plan de acción en materia de prevención, erradicación y reinserción de víctimas de trata de personas y de trabajo forzoso.

Este plan tiene en cuenta el carácter transversal de la problemática y la necesidad de un abordaje integral de las acciones para detectar, prevenir, y combatir el trabajo forzoso y la trata de personas con fines de explotación laboral en la región, entendiendo la importancia de la cooperación, el intercambio de información y la actuación conjunta de los Estados Partes.