En ese sentido y a través de un trabajo en conjunto del área de mecánica con talleres nacionales que están emplazados en diferentes provincias del país, las líneas Belgrano y San Martín, ya cuentan con 46 y 38 vagones más en sus flotas respectivamente, y dos locomotoras para la línea Urquiza.

Estas son tareas que repercuten de forma directa en la disponibilidad de material tractivo y remolcado para hacer frente a la creciente demanda de la logística ferroviaria, como así también generar puestos de trabajo genuino en las diferentes localidades donde se reparan.

Además, a partir de uno de los ejes de la gestión, que es aumentar la disponibilidad de material rodante, desde TAC se lograron mejoras significativas en la cantidad y en los tiempos de intervenciones y mantenimiento corriente de las formaciones lo cual evitó diferir muchas de las refacciones.

Otro pilar fundamental para la puesta en valor de los ferrocarriles de carga fue la recuperación de piezas clave para el funcionamiento de los vagones, como los bogies y pares montados que al ser restaurados a nuevos quedaron a disposición como repuestos.

El plan de mecánica, que continuará también durante los próximos años, incluye la reconversión de vagones para adaptarlos a la diversificación de la carga que está llevando adelante TAC.

En esta línea, a fines de noviembre, Fabricaciones Militares S.E entregó a TAC diez tolvas cerealeras 0 km de industria nacional al tiempo que se generó un acuerdo con la Cámara de Industriales Ferroviarios de la República Argentina (CIFRA) para la producción de mil vagones más.

Con estos trabajos, que se suman a las inversiones proyectadas para obras de infraestructura ferroviaria, se prevé que el 2021 será un año clave para el desarrollo sostenido de los ferrocarriles nacionales de cargas.