Los usos de la fotografía en el museo

La fotografía ha sido históricamente una herramienta fundamental en el ámbito museológico, utilizada para documentar, analizar y divulgar colecciones con fines tanto científicos como patrimoniales. En las últimas décadas, la transición de los procesos analógicos a los sistemas digitales ha promovido la adopción de estándares internacionales para la digitalización técnica de bienes culturales, transformando los modos de registro, diagnóstico y conservación.
Este trabajo explora el uso actual de la fotografía en contextos museales, con énfasis en las normativas, metodologías y herramientas empleadas en la documentación y diagnóstico de obras patrimoniales. Se presenta un estudio de caso realizado en el área de conservación de la Subsecretaría de Patrimonio Cultural, centrado en la aplicación de protocolos técnicos para la captura de imágenes en luz visible, ultravioleta e infrarrojo. Se analiza la incorporación de cartas de color, sistemas de calibración y software de evaluación cromática, así como las soluciones adoptadas para espectros no visibles, incluyendo el uso de materiales como el teflón blanco (PTFE) como referencia métrica.
La investigación destaca la importancia de la gestión del color, la consistencia en los parámetros de captura y la incorporación de metadatos técnicos como elementos clave para asegurar la trazabilidad y reproducibilidad del proceso fotográfico. Asimismo, subraya la necesidad de desarrollar flujos de trabajo adaptados a los recursos y realidades locales, sin perder de vista los estándares internacionales.
Finalmente, se enfatiza el carácter interdisciplinario del registro fotográfico en conservación, que requiere colaboración entre especialistas en restauración, documentación y gestión digital. Esta sinergia resulta esencial para garantizar la función analítica y la preservación a largo plazo de los objetos digitales generados, fortaleciendo así las políticas públicas en materia de conservación del patrimonio cultural.