Acerca del fuego
Para que el proceso de la combustión se inicie y pueda continuar deben estar presentes, manteniendo entre si una adecuada proporción, tres elementos: combustible, oxígeno y calor.
Combustible
Para el caso de los incendios forestales se considera combustible todo material de origen vegetal, independientemente de su estado, condición o ubicación. En estos materiales el compuesto básico es la celulosa (ramas, hierbas, árboles, raíces, etc.). Cada combustible tiene una temperatura de ignición distinta, a la que es necesario llegar para inflamarlo. En la mayoría de los casos, una vez que comienza la reacción de oxidación, el calor desprendido en el proceso sirve para mantenerlo.
Oxígeno
Es un gas que se encuentra en el aire (O2).
Calor
Es una forma de energía medible a través de la temperatura. Produce calor el sol, un rayo, la llama de un fósforo, etc. La combustión es un proceso físicoquímico que consiste en una oxidación rápida que se lleva a cabo a altas temperaturas consumiendo oxígeno y combustible y que deja como resultado final un residuo que consiste mayormente en sales minerales (cenizas). Celulosa + O2 + energía = CO2 + Vapor de H2O + calor = fuego.