La República Argentina está progresando en el cumplimiento de sus compromisos climáticos nacionales e internacionales. A partir de la presentación de su segunda Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) en 2020, el país ha aumentado su ambición climática, reconociendo la urgencia en diseñar e implementar políticas públicas sobre cambio climático. Como parte de ello, desde entonces ha trabajado en impulsar un involucramiento transversal a partir de elementos instrumentales como la Acción por el Empoderamiento Climático (ACE).

Entre 2022 y 2023 se llevó adelante la formulación de la primera Estrategia Nacional de Acción para el Empoderamiento Climático (EnACE), a través de un proceso participativo amplio, público y federal.

La EnACE es un instrumento que atraviesa las políticas públicas para la acción climática con el propósito de generar y articular capacidades y aptitudes que impulsen una acción transformadora frente al cambio climático. Su proceso de diseño constituye un recorrido en la consolidación de los múltiples enfoques y acciones para empoderar a través de la acción climática a las y los habitantes, e instituciones, de nuestro país.

La estrategia surge de la importancia de un abordaje multisectorial y multiactoral, tanto privado como público, social y gubernamental, de la problemática del cambio climático. Se desarrolla en cumplimiento con lo establecido por la Ley Nro. 27.520 de “Presupuestos Mínimos de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático Global”, que explicita la necesidad de preparar a la sociedad ante los cambios climáticos futuros, promocionar una nueva conciencia ambiental que reduzca los impactos y aumente la adaptación mediante la información, participación pública, la sensibilización y el fortalecimiento de capacidades.

Para ello, a través del Gabinete Nacional de Cambio Climático (GNCC) y de sus diversas líneas de trabajo, se promoverán instancias innovadoras, reflexivas y participativas para delinear una estrategia sólida en torno a la acción para el empoderamiento climático.

En el contexto nacional, la ENACE es consecuencia de diversos instrumentos, entre los que se incluyen la Ley General del Ambiente Nro. 25.675, que establece a la educación ambiental como una de sus herramientas fundamentales para la generación de conciencia en la comunidad; la Ley de Presupuestos Mínimos de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático Global Nro. 27.520; la Ley “Yolanda” Nro. 27.592 sobre capacitación obligatoria en desarrollo sostenible y ambiente para quienes se desempeñen en la función pública y la Ley de Educación Ambiental Integral Nro. 27.621, que instituye la Estrategia Nacional de Educación Ambiental Integral.

A nivel regional, también se relaciona con el Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe (Acuerdo de Escazú), ratificado por nuestro país en 2021, ya que la estrategia comprende para su construcción, un proceso participativo amplio que permite la participación pública como un derecho de la ciudadanía.

De este modo, la ENACE busca:

• desarrollar capacidades en las poblaciones para prepararlas frente a los impactos del cambio climático
• impulsar transformaciones hacia un desarrollo económico y social federal, justo, inclusivo, equitativo y resiliente.
• fomentar la construcción de solidaridad, cooperación, organización, participación democrática, pluralidad y soberanía
• contribuir a la reflexión sobre cómo se relaciona la sociedad con la naturaleza y cómo se relacionan las personas entre sí.

Componentes

Para cumplir con sus objetivos, la EnACE se apoya sobre los seis componentes contemplados en la Acción por el Empoderamiento Climático (ACE, por sus siglas en inglés) y acordados en el artículo 6 de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático y en el 12 del Acuerdo de París: la educación, la formación, la sensibilización, el acceso a la información pública, la participación ciudadana y la cooperación internacional. A su vez, en sintonía con la necesidad de generar conciencia sobre la urgencia de la acción climática, la República Argentina ha decidido añadir a la cultura como séptimo componente.

Educación

A través de la educación, se busca elaborar e implementar planes, programas e iniciativas de educación (formales, no formales e informales) que generen cambios innovadores para comprender la relevancia de la acción climática y el carácter integral del ambiente. La articulación de los aspectos ambientales y la planificación educativa propicia instancias de involucramiento y participación ciudadana, de pensamiento crítico y de fortalecimiento de la gobernanza, desde un enfoque de derechos humanos.

Formación

Apunta a promover instancias de formación para generar habilidades prácticas, fortalecer capacidades específicas y potenciar saberes, orientados a su empleo en un contexto socioambiental igualitario. En ese sentido, las nuevas propuestas incluirán un abordaje integral, con foco en la transición justa y la adecuación a los nuevos procesos y modelos ligados al desarrollo sostenible, bajo en emisiones, resiliente y centrado en las personas.

Sensibilización

Se propone elaborar y promover procesos sociales y culturales de toma de conciencia y empoderamiento, que acerquen la temática del cambio climático a distintas personas, sectores y actores a través de diversos medios, con un enfoque orientado hacia la acción y la búsqueda de soluciones.

Acceso a la información pública

El objetivo central de este componente es garantizar, fortalecer y ampliar el derecho de acceso a la información pública de calidad, comprensible, actualizada y gratuita para involucrar activamente a los distintos actores y sectores en los procesos que aborden la acción climática y ambiental.

Participación ciudadana

Se busca fomentar la participación ciudadana efectiva y activa en relación a la acción climática, tanto en espacios institucionalizados como aquellos informales, a los fines de contribuir en los procesos de toma de decisiones informadas.

Cooperación internacional

Este componente se plantea como objetivo fomentar intercambios de experiencias, conocimientos y recursos con diversos actores del plano internacional y regional, con el fin de crear y fortalecer capacidades institucionales, incrementar el apoyo y enriquecer prácticas en torno a la Acción para el Empoderamiento Climático.

Cultura

A través de este componente se busca generar espacios de creatividad para la construcción de ideas y perspectivas para el empoderamiento climático. Se propone además visibilizar y fortalecer valores, significados, saberes y prácticas que sensibilicen y construyan conciencia socioambiental en torno a la acción climática y a la necesidad de transformar nuestros vínculos con la naturaleza, como base material para la vida y las relaciones interculturales.

Descargá la Estrategia Nacional de Acción para el Empoderamiento Climático (ENACE)Argentina

Cultura y cambio climático. Aproximación conceptual y abordaje en el contexto argentino

Ver informe de cierre sobre la consulta pública de la ENACE

Ver informe sobre el proceso participativo para la elaboración de la ENACE